Veo un Consulado de México convertido en la Casa del Pueblo
Veo a nuestra comunidad solicitando servicios y ser atendida con amor y respeto.
Veo honestidad y transparencia en el manejo de todos sus programas de servicios a la comunidad
Veo un consulado sin guardias de seguridad en la puerta
Veo a dos millones de mexicanos con su credencial de votar, fortaleciendo su poder político
Veo como una prioridad de mi labor diplomática el respeto al derecho a la información sobre asistencia consular de nuestros connacionales detenidos en las cárceles del Condado de Harris.
Veo mi responsabilidad diplomática incisiva en la defensa de los derechos individuales de los mexicanos en esta Circunscripción Consular de Houston, al amparo del Derecho Internacional, pues «cualquiera que perjudica a un ciudadano, perjudica indirectamente al Estado, el cual debe proteger a ese ciudadano». (Vattel, 1758). (Art. 36 de la Convención de Viena sobre Relaciones Consulares 1963).
Lo cual concuerda con el objetivo principal del Derecho Internacional contemporáneo: el progreso de los derechos humanos de las personas, antes que las facultades soberanas del Estado. Excepto, claro, en los casos en los que la protección diplomática pueda poner en peligro los intereses generales del Estado y/o su población.
Veo, pues, la defensa inmediata de los derechos humanos de todos los mexicanos que demanden protección y asistencia.
Veo a todos los mexicanos en Texas con licencias de manejo sin importar su situación migratoria
Veo a los jóvenes soñadores organizados para obtener su residencia permanente, con la ayuda de Dios y la unidad de todos nosotros.